Al jinetero cubano poscomunista, habituado a vivir de la gozadera y a “resolver”, habituado a ejercer una actividad parasitaria, le resultará extraordinariamente difícil la integración a una nueva sociedad basada en las libertades.
Enrique Collazo, Zelig Martínez, Madrid | 09/03/2010
Cuba siempre ha sido una isla impúdica y hedonista, al decir del historiador y ensayista Rafael Rojas. Desde los tiempos de la conquista y la colonización americanas la Isla asumió la función de proveedora del... Continuar leyendo